Un hombre de origen mexicano fue culpado porque traía un tatuaje igual al de un violador en serie.
Luis Lorenzo Vargas, de 46 años de edad, siempre se declaró inocente y expresó su preocupación por que el verdadero culpable estuviese «violando o matando a alguien por ahí», pero a pesar de ello fue confundido debido a un tatuaje en su cara en forma de gota muy similar al que las víctimas de violación afirmaron haber visto en su atacante.
Frente a estas declaraciones, los abogados defensores del mexicano aseguraron que existían inconsistencias en las descripciones. Por lo cual, un tribunal de Los Ángeles absolvió a Luis Lorenzo Vargas.
No obstante y Pese a que Vargas fue exonerado de los cargos, perdió su calidad migratoria en los Estados Unidos y tras su liberación fue entregado al Servicio de Inmigración y Ciudadanía, situación que le ha impedido regresar con su familia.