Una serie de violentos tornados que se propagaron por al menos tres estados del sur de Estados Unidos dejaron tragedia y destrucción a su paso, con un saldo inicial de al menos 10 personas muertas este jueves.
El sistema afectó una porción comprendida desde el Atlántico medio hasta el sureste y las costas del Golfo de México, de acuerdo con el Servicio Nacional de Meteorología (NWS), que se ha visto afectado por inusuales altas temperaturas acompañadas por lluvias.
Seis de las víctimas fatales fueron reportadas en el estado de Mississippi, junto a otras tres en Tennessee y una más en Arkansas, además de decenas de heridos.
Mississippi y Tennessee estuvieron en la senda destructiva de un tornado que se estima avanzó a lo largo de 208 kilómetros, reduciendo a escombros lo que encontró a su paso.
El gobernador de Mississippi, Phil Bryan, declaró el estado de emergencia en siete condados más afectados por ese tornado.
De acuerdo con el NWS, las fuertes lluvias provocaron inundaciones con porciones de Georgia, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Virginia, Maryland, incluyendo la capital Washington, en el Distrito de Columbia.
Aunque el sistema parecía debilitarse, las autoridades advirtieron de la amenaza de torbellinos en algunas áreas de ese corredor en el sur, como resultado de la persistencia de las condiciones climáticas.
