Personal del equipo acuático de Bomberos recuperaron el cuerpo de un hombre que se presume murió ahogado en el Río Bravo, esta tarde.
La primer víctima que cobra el afluente en Nuevo Laredo, no está identificada por autoridades. La recuperación del cuerpo de llevo a cabo a la altura de la avenida Obregón.
El cuerpo no presentaba huellas de violencia, según contaron autoridades. Contaba con dos tatuajes uno en la espalda «Bebé» y otro con el apellido » De la Cruz».
Autoridades dieron fe de los hechos, ordenando el traslado del cuerpo a una funeraria para la práctica de la autopsia de ley.