Al menos 11 cubanos se encuentran desaparecidos tras ser presuntamente plagiados por el crimen organizado cuando viajaban de Reynosa a Nuevo Laredo, Tamaulipas, para sumarse al centenar de migrantes isleños que esperan recibir asilo político del Gobierno de Estados Unidos.
De acuerdo con reportes de portales electrónicos y redes sociales, que no han sido desmentidos por autoridades consulares ni de Cuba ni México, el grupo de cinco mujeres, cinco hombres y un menor de 12 años habría sido secuestrado el pasado 2 de febrero en la salida de Reynosa.
Presuntamente, los extranjeros abordaron en la Central Camionera de Reynosa una unidad de Autobuses del Noreste que fue interceptada por un grupo de hombres armados que obligaron al operador de la unidad a detenerse y bajar a los extranjeros cuando apenas habían tomado la Carretera Ribereña.
Los reportes señalan que uno de los migrantes alcanzó a avisar por celular a sus familiares en Cuba que estaban siendo plagiados, pero la llamada fue interrumpida abruptamente.
Los cubanos, originarios de Puerto Padre, provincia de Las Tunas, habrían salido en enero de su país en una lancha rápida, con apoyo de traficantes de México y El Salvador.
Al llegar a Cancún, el 12 de enero recibieron la noticia del fin del programa del Gobierno estadounidense Pies Secos, Pies Mojados, que otorgaba un inmediato estatus legal a los cubanos que llegaran por tierra a ese país del norte de América, así lo informó el periódico Reforma.
Tras conseguir un salvoconducto del Gobierno mexicano, los migrantes viajaron a Reynosa, donde, según sus familiares, las autoridades migratorias les quitaron el dinero que llevaban, quedando a merced de los «coyotes».
De acuerdo con los reportes, los cubanos fueron retenidos en la casa de un mexicano y su esposa, una salvadoreña, entre el 27 de enero y el 1 de febrero, con la amenaza de entregarlos a un cártel si sus familias en Estados Unidos no pagaban mil 400 dólares cada uno, más 800 dólares por hospedaje.
Tras escapar a un hotel, el 2 de febrero abordaron el autobús a las 11:50 horas, pero en el camino habrían sido secuestrados.
El chofer de la unidad llegó a Nuevo Laredo con el resto de los pasajeros, pero no denunció algún secuestro colectivo.
En un video que circula en Youtube, se observa a los isleños en el cuarto de un hotel rezando para llegar a su destino.
Hasta el momento se desconoce su paradero.
