Derivado de las acciones realizadas por el Grupo de Coordinación de Tamaulipas, elementos de la Procuraduría General de Justicia del estado lograron la aprehensión de una presunta integrante de un grupo delictivo y señalada como probable responsable de secuestros y violación de leyes sobre inhumaciones y exhumaciones.
En enero del 2014, en el Municipio de San Fernando, Tamaulipas, participó en el secuestro de una joven y se encargó de mantenerla en cautiverio hasta que la víctima fue asesinada.
De las investigaciones realizadas en torno al caso se logró el hallazgo de diversos restos óseos, que al ser objeto de dictámenes periciales confirmaron que pertenecían a la víctima.
