Un saldo preliminar de diez muertos, cuatro de ellos soldados, 12 lesionados entre policías estatales y militares, además de 14 delincuentes detenidos, dejó en las últimas horas enfrentamientos en el convulso Palmar de Bravo, una zona del centro de México golpeada por grupos del crimen organizado especializados en secuestros y robo de combustible.
Al filo de las 20 horas del miércoles, un grupo de militares respondió a una delación de una toma clandestina de gasolina en ductos de Petróleos Mexicanos, sin embargo durante la inspección fueron atacados a distancia por un grupo que uso a mujeres y niños como escudos humanos.
“El personal militar decidió no responder la agresión, en virtud de que las mujeres y los menores fueron empleados como escudo por los agresores”, informó a la prensa Diódoro Carrasco, secretario de Gobernación de Puebla.
Entre los seis delincuentes fallecidos hay una mujer, en tanto que en la Fiscalía tenemos 14 detenidos, además de que decomisamos vehículos blindados y armas que aún son contabilizadas”
En la operación han intervenido hasta el momento mil elementos militares, además de dos helicópteros que refuerzan la seguridad.
Palmar de Bravo, a unos 200 kilómetros de Ciudad de México, es el corazón de la extracción ilegal de combustible de ductos de Petróleos Mexicanos, además de escenario permanente de ejecuciones y enfrentamientos entre bandas que se disputan el control de la región.
“Si no sueltan a los que se llevaron, este desmadre no se va a componer”, gritaban pobladores de Palmarito mientras quemaban llantas para bloquear la Autopista Puebla- Orizaba, una de las más circuladas del país, en reclamo de la liberación de los detenidos.
Durante los primeros cuatro meses del año, fuerzas policiacas militares y estatales decomisaron dos millones de litros de gasolina robada, se detuvo a 340 delincuentes relacionados con el ilícito y se aseguraron mil 80 vehículos usados para el trasiego de la gasolina robada.
