El running back titular de los Dallas Cowboys, Ezekiel Elliott, ha sido suspendido por seis partidos por la NFL tras violar la política de la liga sobre conducta personal, según fuentes han indicado a Adam Schefter, de ESPN.
La suspensión viene como resultado de una investigación que comenzó hace más de un año luego que una ex novia acusara a Elliott de violencia doméstica en Columbus, Ohio. La Oficina del Fiscal de Distrito de la Ciudad de Columbus anunció en septiembre que no radicaría cargos contra Elliott porque hay «información conlifctiva e inconsistente» sobre el caso, pero la NFL puede penalizar a un jugador aún ante la ausencia de cargos criminales radicados.
Elliott tendrá tres días laborales para radicar una notificación de apelación y una vista tiene que ser pautada entre los primeros 10 días de que se reciba dicha notificación, según el Artículo 46 del convenio colectivo, el cual gobierna las acciones disciplinarias impuestas por el comisionado Roger Goodell.
La apelación es vista por el comisionado o su designado, usualmente el ejecutivo de la NFL Harold Henderson.
Las autoridades del orden público concluyeron que la persona que acusa a Elliott no era creíble y rechazaron radicar cargos. Varios testigos, incluyendo algunos cercanos al caso, escucharon a la mujer gritarle a Elliott y decir que ella “arruinará tu carrera” en reacción a que Elliott le indicara que no interesaba continuar con su relación.
La suspensión de la liga a Elliott es diferente a la que le impuso en el 2014 al entonces running back de los Baltimore Ravens, Ray Rice, quien sí enfrentó cargos y luego llegó a un acuerdo con la fiscalía tras una investigación por las autoridades.