Reunirse con sus padres en el extranjero es la razón principal por la que menores de edad salen de su ciudad de origen y deciden cruzar el peligroso Río Bravo.
En el presente año un total de 673 niños y niñas se han atendido en el Centro de Atención a Menores Fronterizos (CAMEF) de Nuevo Laredo.
Del total, 561 corresponden a niños de nacionalidad mexicana, la mayoría de los estados de Guerrero, San Luis y Estado de México y 112 menores originarios de Centro América.
El CAMEF apoya con estancia de menores al Instituto Nacional de Migración, mientras la autoridad migratoria enlaza a un familiar en el país de origen y se haga el traslado.
En el mismo periodo pero de 2017, se contabilizó un total de 1066 menores repatriados y 94 migrantes atendido dentro de CAMEF Nuevo Laredo.