Luego de siete meses de especulaciones con respecto a la relación sentimental entre Paulina Rubio y Gerardo Bazúa, fue este último quien durante una entrevista para el programa «Intrusos» puso fin a los rumores.
Sin dar grandes detalles sobre su ruptura con la llamada «Chica Dorada», Bazúa confirmó que su relación llegó a su fin, no obstante, recalcó que entre ellos «siempre habrá amor».
Al ser cuestionado por el hermetismo con que han mantenido esta noticia, el cantante explicó: «Estamos guardando respeto a nuestra relación y a nuestros hijos».
Sobre las acusaciones que lo etiquetan de ser un mal padre con los dos hijos de su anterior relación, Jerry contestó: «Los morros no dejan de comer. Mi motor son mis hijos y siempre estoy al pendiente de ellos».