El obispo de la diócesis de Nuevo Laredo, Enrique Sánchez Martínez, expresó la necesidad de sacerdotes que existe en la ciudad fronteriza, lo que deriva que no poder edificar nuevas parroquias.
“No podemos hacer nuevas porque no hay sacerdotes” expresó el obispo ante la problemática de interés religioso.
En Nuevo Laredo existen 42 parroquias todas con su párroco, pero con la necesidad de contar con más sacerdotes para cubrir la demanda de la población.
El obispo no señaló un número determinado de sacerdotes, sino todos los que pueda haber para trabajar con la comunidad.
Para atender la problemática de manera parcial, han llegado a la ciudad sacerdotes de otras diócesis, además del trabajo que realizan las religiosas y diáconos