Fue cerrado el Centro Regional de Desarrollo Infantil (CEREDI) de Nuevo Laredo después de permanecer en operación un corto plazo de 5 meses.
La clausura se deriva al recorte presupuestal que hiciera el gobierno federal al inicio de 2019 y que terminó con el programa PROSPERA.
En el lugar se atendía a 400 niños con problemas de discapacidad, de 1 a 5 años de edad.
El CEREDI albergaba a una plantilla laboral de 48 profesionistas, los cuales están a la espera de una posible reapertura para volver a trabajar.
El centro llevaba a cabo terapias de lenguaje, sensorial, estimulación temprana y psicomotora a menores que presentaban una discapacidad.
El gobierno federal informó en su momento que los recortes presupuestales a Prospera se derivaron al encontrar irregularidades y corrupción en los recursos públicos.