Gabriela Villalobos
Cansados de vivir entre aguas negras, vecinos de la colonia Altamira sector 2, en el municipio de Altamira retuvieron por varias horas a trabajadores de Comapa que acudieron al lugar para romper la calle y tratar de solucionar la problemática, toda vez que aseguraron ese sólo sería un mejoralito.
Encabezados por Julio César Suárez y Olegaeio Hernández un grupo de vecinos explicaron que el escurrimiento de aguas negras ya tiene varios años, pero que desde el año pasado se agudizó al grado de que de los registros de los domicilios brotan las aguas residuales.
Señalaron que Comapa rompió la calle Vicente Suárez el año pasado, pero que dejaron una zanja durante cinco meses, a donde cayó un vehículo, y no se soluciono la problemática.
Explicaron que son alrededor de 400 familias las afectadas, quienes ya presentan enfermedades en la piel e incluso hay quienes presentan síntomas y temen que sea dengue.
Tras reportar el escurrimiento, al lugar la mañana see ste martes arribo la unidad 013 de Comapa con una cuadrilla compuesta por cuatro trabajadores, quienes al ver que la ciudadanía no les permitiría realizar su trabajo recibieron la orden de retirarse, pero los vecinos se colocaron enfrente de la unidad para impedir que se fuera y así presionar a los directivos de Comapa para que remedien de raíz esta situación.
