Gabriela Villalobos
Desesperada se encuentra una madre de familia de Altamira, debido a que en el IMSS no hay medicamentos para la epilepsia y su pequeña hija desde noviembre del año pasado dejó de recibir su tratamiento.
Martha Laura Zúñiga Ramírez, del fraccionamiento los Mangos, comentó que han tenido que hacer un esfuerzo para poder adquirir cada diez días el medicamento, porque en la clínica 77 del Seguro Social le dicen que no hay, y no le dan fecha para que pueda surtirla de nuevo.
«Estamos comprando el medicamento nosotros para que no tenga ataques de epilepsia, pero no es justo que en el Seguro sólo te digan que no hay, uno tiene que hacerle como pueda, y así como está la situación económica está bien complicado, tenemos que estirar el gasto».
Indicó que tuvieron que acudir al DIF para pedir el apoyo de medicamentos.Zúñiga Ramírez, mencionó que no son las únicas que enfrentan el desabasto de medicamentos, toda vez que conoce a una persona que desde noviembre de 2019 dejó le dejaron desurtir su tratamiento contra el cáncer en la clínica del IMSS, el cual supera los 4 mil pesos.
