Aplican multa de 48 mil pesos tras explosión de pipa en Altamira.
La empresa propietaria de la pipa que explotó en la colonia Miramar en Altamira, tendrá que pagar una multa, debido a que el accidente se suscitó cuando era reparada en una colle donde no tenía permiso.
El director de Protección Civil, Andrés Hernández, dio a conocer que la sanción que se aplicará a la empresa Rodcer Transporta, podría alcanzar apenas las 500 UMAS (Unidad de Medida y Actualización) lo que equivale a un total de 48 mil 110 pesos, cifra máxima que establece la Ley de Protección Civil en Tamaulipas por la falta que se cometió.
Se han estado localizando a los representantes de la empresa transportista para solicitar los permisos del traslado de materiales peligrosos, ya que aún contaba con residuos de combustible, pero al parecer la empresa es foránea.
También dijo que la sanción hacía la empresa es porque ellos están obligados a llevar a sus unidades a un lugar donde cuentan con los permisos y estén certificados para la reparación.
Detalló que el dictamen está listo para esta semana, pero también va a haber otras instancias que van a intervenir, una de ellas es la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) pues en el lugar se derramó combustible, lo que provocó contaminación en el suelo.
Al respecto del taller mecánico, Protección Civil Municipal será el encargado de interponer las sanciones correspondientes, pero hasta el momento solo se sabe que el taller no tenía permiso para hacer reparaciones mecánicas, además de que los trabajos se estaban haciendo con una máquina que no era la ideal para ese tipo de casos, no tenían un equipo de seguridad y estaban invadiendo una vialidad y además un derecho de vía de Pemex.
Además hubo daños que afectaron a los vecinos del lugar donde se registró la explosión, ya que hubo pérdidas materiales, al registrarse ventanas con vidrios rotos, aparatos eléctricos que sufrieron cortocircuito y lo que conlleva la suspensión de energía eléctrica, fue el saldo que reportaron los vecinos de al menos dos manzanas, en la colonia Miramar de Altamira.
Antonia Guerrero, dijo «fue un estruendo muy fuerte era como si nos estuvieran bombardeando, se cimbraron las casas, hubo muchos daños, salí corriendo atrás de mi hijo, yo ando mal de los nervios, pero muchos vecinos sí entraron en shock, porque ellos están enfrente».
