Julian Assange será extraditado a Estados Unidos; «es un día oscuro para la libertad de prensa», acusa WikiLeaks
Estados Unidos quiere juzgar a Julian Assange por una fuga masiva de documentos confidenciales, con lo que el gobierno británico ha firmado este viernes 17 de junio, el decreto de extradición a Estados Unidos del fundador WikiLeaks.
Los allegados de Assange y WikiLeaks informaron que apelarán la decisión, disponen de 14 días para hacerlo, y lamentaron que éste fuera un «día negro para la libertad de prensa y la democracia británica», comunicó la la agencia AFP.
Es de recordar que en abril de este año fue emitido por la justicia británica la orden formal de entregar a Washington al fundador de WikiLeaks, tras una saga judicial de varios años, pero correspondía a la ministra de Interior británica, Priti Patel, firmar el decreto, algo que hizo este viernes. «En virtud de la ley de 2003 sobre la extradición, la ministra debe firmar una orden de extradición si no hay ningún motivo que la prohíba», dijo un portavoz del ministerio de Interior-
«Los tribunales británicos no concluyeron que fuera opresivo, injusto o un abuso procesal extraditar al señor Assange. Tampoco concluyeron que la extradición fuera incompatible con sus derechos, incluyendo el derecho de tener un juicio justo, y con la libertad de expresión y (garantizaron) que durante su estancia en Estados Unidos será tratado de manera apropiada, también con respecto a su salud», de acuerdo con el portavoz.
Por su parte, Stella Assange, abogada y esposa de Assange, había pedido al gobierno británico que no firmara el decreto. «Cualquier país que se preocupe por la libertad de expresión tendría que sentir vergüenza al ver que la ministra de Interior ha aprobado la extradición de Julian Assange a Estados Unidos, el país que complotó para asesinarlo», dijo en un comunicado.
«Julian no ha hecho nada malo. No ha cometido ningún crimen, no es un criminal. Es un periodista, un editor y está castigado por haber hecho su trabajo», dijo la defensora, con quien contrajo matrimonio en marzo, y con el que tiene dos hijos, concebidos durante la estancia de Assange en la embajada de Ecuador en Londres.
Stella Assange garantizó que no es el final de la batalla sino «el inicio de una nueva batalla jurídica».