Colocan altar para recordar a Angélica y sus dos hijos asesinados en Altamira.
Por Gabriela Villalobos.
En la vivienda marcada con el número 330 de la calle Navarra del fraccionamiento Haciendas 2 en el municipio de Altamira se montó un pequeño altar en honor a sus tres habitantes, quienes fueron brutalmente asesinados hace dos años.
Se trata de Angélica, la joven madre de familia de 30 años de edad, que fue asesinada con un arma blanca junto a sus hijos de 8 y 5 años, cuyos cuerpos fueron encontrados en avanzado estado de descomposición.
Con flor de muerto, crisantemos, veladoras, refrescos, juguetes y dulces, los vecinos del lugar se dieron a la tarea de armarles un pequeño altar para recordarlos.
Y es que el mes de abril, quedó marcado en las memorias de los habitantes de ese fraccionamiento de interés social, que no daban crédito a la tragedia que ocurrió al calor del alcohol y los celos.
Fue el 9 de ese mes, hace dos años cuando Angélica recibió la visita de su amiga Diana y su novia Wendy, con quienes estuvo bebiendo hasta altas horas de la noche, sin imaginar que la fatalidad que rondaba a su familia, ya que ambas mujeres le arrebataron la vida a ella y a sus hijos, para después tratar de limpiar la escena del crimen y robar artículos de valor para poder huir de la justicia.
Los vecinos señalan que de vez en cuando la familia de Angélica acude a la vivienda y que lo poco que platican con ellos, les han dicho que el caso está estancado.
Por lo que en esta ocasión el altar fue no sólo para recordar a la joven y sus hijos, sino también para sumarse al reclamo de la familia que exige Justicia.
