Con agua y gatorades que compran con sus propios recursos, trabajadores de molinos y tortillería de la zona sur, tratan de evitar ser víctimas de un golpe de calor
Y es que los escasos abanicos con que cuentan son insuficientes para hacerle frente a las altas temperaturas que se registran en el interior de los negocios al encender las máquinas para elaborar más tortillas.
«El calor es sofocante, hoy me he sentido mal y ayer también, me siento como desesperada, es demasiado el calor, pero no tengo de otra, debo venir a trabajar así porque tengo deudas que pagar y no esperan, no me puedo reportar enferma», señaló una empleada de una tortillería De la Torre, ubicada en la colonia Primavera del municipio de Tampico.
Señaló que la sensación es agobiante, pero tiene que aguantarse hasta terminar su turno para que no le descuenten el día.
Y es que el agua y las bebidas que toman no les ayudan en nada, porque el calor en el interior es sofocante.
