El Senado de la República aprobó por unanimidad una reforma a la Ley Federal del Trabajo y la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado para prohibir la solicitud de la carta de antecedentes no penales.
La reforma busca evitar la discriminación en la contratación de trabajadores por motivos de antecedentes penales y promover la reinserción social de personas con historial delictivo.
El proyecto también prohíbe la discriminación en el ámbito laboral por origen étnico, género, edad, discapacidad, condición social, condiciones de salud, religión, opiniones, preferencias sexuales, estado civil o antecedentes penales.
Además de la reforma mencionada, el Senado aprobó medidas para que los campesinos tengan acceso al seguro social y para establecer un lenguaje inclusivo en los ordenamientos jurídicos.