Con palas, cubetas y hasta taras, habitantes de los ejidos ubicados en las márgenes del río Tamesí de Altamira, no se quedaron de brazos cruzados y tomaron la iniciativa de «dragar» los canales ante el temor de quedarse incomunicados.
A bordo de lanchas con las que se desplazan largos trayectos en remo, llegaron a los canales para retirar el lodo e invitar al resto de los pescadores a sumarse o a cooperar económicamente, pues el beneficio será para todos.
A través de redes sociales, Lorenzo Díaz hizo un llamado a sus compañeros para que se unan al dragado que de manera manual realizan en el cuerpo de agua, ya que de lo contrario no podrán salir de sus comunidades si continúa bajando el nivel.
Y es que su principal temor es quedarse incomunicados, imposibilitados a salir a trabajar, comprar despensa o acudir al médico.
