El 1 de junio de 2024 la FIFA incorporó nuevas normas sobre las condiciones de trabajo de las futbolistas profesionales haciendo hincapié en los derechos de maternidad.
Las normas relativas a las jugadoras incluyen un permiso mínimo de dos, cuatro u ocho semanas por adopción y de al menos ocho semanas para las parejas de madres en relaciones homosexuales. Por otra parte, las futbolistas tienen derecho a ausentarse por problemas de salud relacionados con la menstruación y existe una nueva cláusula que fomenta un entorno familiar favorable en las federaciones para las jugadoras con hijos.
La normativa, que ahora forma parte del Reglamento de la FIFA sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores (RSTP), fue negociada en nombre de las jugadoras por los abogados de FIFPRO Roy Vermeer, Loïc Alves y Alexandra Gómez Bruinewoud, que aquí explican cómo se llegó a ella.
¿Esta es la segunda ronda de normas de la FIFA relacionadas con la maternidad?
Alexandra Gómez Bruinewoud: Sí. Cuando FIFPRO empezó a redactar una política parental en el fútbol profesional en 2019, la única cláusula específica para las mujeres en el RSTP de la FIFA era la exclusión del fútbol femenino de la indemnización por formación. Cuando FIFPRO presentó su política en 2020, hubo una buena colaboración con la FIFA y, a finales de ese año, habíamos negociado un conjunto inicial de normas de maternidad que entraron en vigor el 1 de enero de 2021: estas otorgan a las futbolistas el derecho a 14 semanas de baja por maternidad remunerada, entre otras prestaciones.
¿Cómo han cambiado esas primeras reglas de maternidad la carrera de las futbolistas?
Se han convertido en una referencia para los derechos de los jugadores y han ayudado a madres de todo el mundo. Ayudan a los jugadores a seguir en activo y a no verse obligados a elegir entre la maternidad y su trabajo como futbolistas. Una decisión histórica de la Cámara de Resolución de Disputas de la FIFA en el caso de Sara Björk Gunnarsdóttir contra el Olympique Lyonnais recibió atención mundial. En Suecia existe una referencia directa a las normas de maternidad de la FIFA en un Convenio Colectivo (CBA) entre jugadores y clubes. En Francia, Australia e Inglaterra, los mismos derechos se utilizaron y se utilizan como base para las negociaciones de los CBA.
En Alemania la arquera Almuth Schult se convirtió en la primera jugadora de su país en inscribirse en un nuevo club fuera de los plazos normales de traspaso tras dar a luz; lo hizo en virtud de una disposición de la FIFA que entró en vigor en 2021. Almuth pudo fichar por el Hamburgo SV en abril.
Ésa es la buena noticia. La mala noticia es que la mayoría de las 211 asociaciones miembro de la FIFA aún no han aplicado estas normas obligatorias de maternidad a escala nacional. Y ello a pesar de las cuatro cartas oficiales que la FIFA ha enviado a las asociaciones miembro pidiéndoles que lo hagan. Esto es por supuesto preocupante y significa que muchas jugadoras que juegan en sus propias ligas nacionales no tienen la misma protección que sus compañeras en otras partes del mundo.
¿Qué opina FIFPRO de la nueva normativa que entró en vigor el 1 de junio de 2024?
Las primeras normas de maternidad fueron para nosotros sólo el primer paso y siempre quisimos más. Muchas de las normas adicionales que se adoptaron el 1 de junio son por las que hemos estado luchando en nombre de los jugadores durante los últimos años; de hecho, desde antes de la primera serie de normas sobre maternidad. Son un paso muy positivo y las recibimos con gran satisfacción pero lamentamos que sigan existiendo algunas deficiencias.