La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México (ONU-DH México) ha expresado su profundo pesar por el fallecimiento de Armando H.G., un estudiante de bachillerato de 16 años, quien perdió la vida a causa de disparos presuntamente realizados por elementos del Ejército en Nuevo Laredo. La ONU-DH México subrayó que, aparentemente, el joven no recibió atención médica oportuna tras el incidente.
En un comunicado compartido en redes sociales, el organismo internacional reiteró su llamado a las autoridades para esclarecer los hechos y garantizar el apoyo adecuado a los familiares de Armando. Asimismo, la ONU-DH México advirtió que, si se confirma la participación de los militares, se evidenciarán los posibles impactos negativos del despliegue de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública, especialmente en lo que respecta a la protección de la infancia.
El comunicado también incluyó un mensaje de condolencias hacia la familia de Armando, quien trabajaba para apoyar la economía de su hogar.
El caso de Armando no es el primero en involucrar a militares en presuntas violaciones de derechos humanos. En abril pasado, el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo denunció que soldados dispararon arbitrariamente contra dos jóvenes en una camioneta, resultando en la muerte de uno de ellos. Otro incidente, registrado en mayo de 2023, mostró en un video cómo militares presuntamente asesinaron a cinco civiles.
El informe de Causa en Común, «Las Fuerzas Armadas: un poder letal, sin rendición de cuentas», señala que el Ejército es una institución propensa al uso excesivo de la fuerza, operando sin protocolos claros para asegurar que este uso sea necesario, legal, y proporcional, y careciendo de mecanismos adecuados de rendición de cuentas.