Los Dodgers de Los Ángeles aseguraron su octavo título de Serie Mundial al vencer 7-6 a los Yankees de Nueva York en el Juego 5, en una vibrante noche de miércoles en el Bronx. El equipo angelino logró una histórica remontada para coronarse en el «Clásico de Otoño».
Los Yankees tomaron rápidamente la delantera 2-0 en la primera entrada, cuando Aaron Judge, quien había estado discreto en la serie, conectó el primer lanzamiento de Jack Flaherty y lo envió a las gradas del jardín derecho. Nueva York amplió su ventaja a 5-0 con tres carreras más hasta la quinta entrada, pero una serie de errores defensivos abriría las puertas para el regreso de los Dodgers.
Un fallo de Judge permitió que una línea suave de Tommy Edman cayera, poniendo a dos corredores en base sin outs. Dos errores adicionales de la defensa neoyorquina facilitaron que los Dodgers igualaran el marcador: Freddie Freeman pegó un sencillo de dos carreras y luego Teoscar Hernández conectó un doble productor que empató el juego ante Gerrit Cole.
Freeman, quien empató un récord de la Serie Mundial con 12 carreras impulsadas, fue galardonado como el Jugador Más Valioso (MVP). El veterano, de 35 años, había logrado conectar jonrones en cada uno de los primeros cuatro juegos de la serie, convirtiéndose en el primer jugador en lograr tal hazaña. Su racha comenzó con un inolvidable grand slam en el primer juego, en Los Ángeles.
Aunque los Yankees retomaron la ventaja en la sexta entrada con un elevado de sacrificio de Giancarlo Stanton que anotó a Juan Soto, los Dodgers no se dieron por vencidos. En la octava entrada, con las bases llenas, un elevado de sacrificio de Gavin Lux trajo a Enrique Hernández para empatar el juego. Minutos después, Mookie Betts, con otro elevado de sacrificio, impulsó la carrera de la victoria.
Walker Buehler se encargó de asegurar el campeonato, lanzando una novena entrada perfecta y registrando su primer salvamento en Grandes Ligas. “Somos resilientes”, declaró Betts. “Fue amor, fue determinación. Estoy orgulloso de nosotros”.
Con 98 victorias en la temporada regular y el mejor récord de las Grandes Ligas, los Dodgers culminan un año brillante. Shohei Ohtani, cuyo contrato de 10 años y $700 millones resultó crucial para reforzar la ofensiva del equipo, fue una pieza fundamental. Además, la firma del estelar japonés Yoshinobu Yamamoto y del jardinero Teoscar Hernández fortalecieron un equipo lleno de talento.
Este campeonato también representa redención para el mánager Dave Roberts, quien enfrentaba presiones luego de dos años sin éxitos en los playoffs.
WORLD SERIES CHAMPIONS. THEY NOT LIKE US. pic.twitter.com/8Cs75zh1Xe
— Los Angeles Dodgers (@Dodgers) October 31, 2024
