La Iglesia católica ha hecho un llamado a los legisladores a evitar que las ideologías prevalezcan sobre la vida humana, en respuesta a la reciente iniciativa presentada en el Congreso de la Ciudad de México para eliminar el delito de aborto del Código Penal local.
En su editorial dominical «Desde la Fe», la institución advirtió que la reforma, impulsada por legisladores del partido Morena y sus aliados, permitiría la interrupción del embarazo en cualquier momento, lo que, según la Iglesia, vulneraría principios constitucionales como la proporcionalidad y la protección progresiva del derecho a la vida.
Actualmente, en Ciudad de México el aborto es legal hasta las 12 semanas de gestación, pero con la reforma propuesta, se eliminaría cualquier sanción penal en todos los casos, situación que la Iglesia considera preocupante. La institución señaló que esta medida afectaría gravemente a las mujeres en situaciones de vulnerabilidad, especialmente aquellas que viven en la pobreza, exponiéndolas a mayores riesgos de violencia, coerción y exclusión de políticas públicas que atiendan sus necesidades reales, como el acceso a servicios de salud de calidad.
Además, la Iglesia subrayó que los abortos en etapas avanzadas presentan riesgos físicos y psicológicos más graves. Sin citar fuentes específicas, afirmó que algunos estudios sugieren que las interrupciones realizadas después de las 20 semanas aumentan significativamente la mortalidad materna.
La Iglesia también recordó que México ha firmado tratados internacionales, como la Convención Americana sobre Derechos Humanos, que obliga al país a proteger la vida, y que la despenalización total del aborto iría en contra de esos compromisos. Asimismo, destacó que la medida contradiría principios bioéticos fundamentales, como la no maleficencia y la justicia, ignorando la capacidad del feto de sentir dolor en etapas tardías del embarazo, lo cual, según la Iglesia, le otorga derechos éticos que requieren protección legal.
Finalmente, la Iglesia católica exhortó a los legisladores de la Ciudad de México a reconsiderar las implicaciones de esta reforma y a rechazar lo que calificaron como una «violación seria en materia de humanismo».
Esta postura llega poco después de que Michoacán se convirtiera en el decimoquinto estado de México en despenalizar el aborto. Actualmente, el aborto es legal antes de la semana 12 en varios estados, incluyendo Baja California, Ciudad de México y Guerrero, mientras que otros estados, como Sinaloa y Aguascalientes, imponen restricciones más severas.
