El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dio un paso clave en la modernización de sus servicios con la implementación del «Expediente Clínico Electrónico» (ECE), un sistema que permitirá a los derechohabientes contar con un historial médico digital, accesible y actualizado en tiempo real. La medida, anunciada por el director general del IMSS, Zoé Robledo, busca agilizar la atención médica y mejorar la calidad de los diagnósticos y tratamientos.
Este sistema es el segundo más grande de su tipo a nivel mundial, albergando más de 53.7 millones de expedientes, 722 millones de notas médicas, 1.8 mil millones de recetas, 1.2 mil millones de estudios de laboratorio, 2.6 millones de ingresos hospitalarios, 7.8 millones de visitas a Urgencias y casi 69 millones de incapacidades. La tecnología detrás del ECE permite que los médicos tengan un acceso más integral a la información médica de los pacientes, incluyendo diagnósticos previos, procedimientos quirúrgicos, resultados de laboratorio y tratamientos farmacológicos.
“Con este expediente, los médicos pueden consultar las notas de sus colegas, antecedentes clínicos de otras unidades de atención, procedimientos quirúrgicos aplicados al paciente, evolución en urgencias y hasta las recetas prescritas a lo largo de los años”, explicó Robledo durante la presentación de las Metas del Sector Salud 2024-2030.
Además de mejorar la atención en el IMSS, este expediente digital es una base para la creación de un sistema nacional universal de historia clínica, que permitirá a la población contar con un registro médico accesible en diferentes instituciones, como el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) o IMSS-Bienestar. Zoé Robledo detalló que ya se están llevando a cabo trabajos de colaboración con la Agencia de Transformación Digital para hacer este sistema compatible en otras instituciones de salud pública.
Antes del ECE, el sistema de expedientes era en su mayoría manual y fragmentado, lo que dificultaba la transferencia de información entre unidades de salud. «Si un paciente se mudaba y se adscribía a otra Unidad de Medicina Familiar, debía rehacer su expediente desde cero, lo que complicaba la atención y retrasaba los diagnósticos», señaló Robledo.
El Expediente Clínico Electrónico también facilita un acceso más rápido a información clave, reduce errores causados por registros en papel y asegura una mayor precisión en los tratamientos. Gracias a este sistema, los médicos pueden consultar, entre otros elementos:
- Notas médicas previas y diagnósticos de otros profesionales.
- Consultas realizadas en segundo y tercer nivel de atención.
- Medicación administrada, ya sea temporal o crónica.
- Procedimientos quirúrgicos y tratamientos en estancias hospitalarias.
- Resultados de laboratorio y evolución en urgencias.
- Recetas médicas emitidas a lo largo del tiempo e incapacidades vigentes.
El IMSS subraya que la digitalización de estos registros médicos no solo optimiza el servicio para los usuarios, sino que sienta las bases para una atención médica más integrada y accesible en todo México.
