Este martes, autoridades locales confirmaron el descubrimiento de un cadáver en el Río Bravo, específicamente a la altura del ejido El Soliseño, en la carretera que conduce a Reynosa. El hallazgo fue realizado por personal de Migración, quienes al encontrar el cuerpo dieron aviso inmediato a los servicios de emergencia.
Al sitio llegaron rápidamente efectivos de Protección Civil, ambulancias Orduña y personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado. Según los primeros reportes, el cadáver corresponde a un hombre de entre 35 y 40 años, quien llevaba puesta una camisa a rayas de color naranja y un pantalón de mezclilla. Se estima que el cuerpo llevaba alrededor de 12 horas de fallecido antes de ser localizado.
El cadáver fue trasladado al Servicio Médico Forense (SEMEFO) para realizar los estudios correspondientes y así determinar la causa exacta de la muerte. Por el momento, las autoridades no han logrado identificar al fallecido, y se espera que familiares o conocidos puedan reconocerlo en las próximas horas.
El caso sigue bajo investigación para esclarecer las circunstancias de este lamentable suceso.