La futura sepultura del papa Francisco, quien falleció el pasado lunes a los 88 años, está casi terminada en la Basílica de Santa María La Mayor, en Roma.
Fiel a su estilo austero, el pontífice argentino pidió una tumba sencilla: una losa de mármol con la inscripción “FRANCISCUS” y una reproducción en la pared de su cruz pectoral.
El lugar elegido para su descanso final no es la tradicional cripta de San Pedro en el Vaticano, donde yacen varios de sus predecesores, sino la Capilla Paolina, en la nave izquierda de Santa María La Mayor, junto al icono bizantino de la Virgen “Salus Populi Romani”, una de las más veneradas por Francisco.
Este jueves, operarios ultimaban los detalles de la tumba, que se mantiene protegida con una valla de madera mientras decenas de curiosos y fieles se acercaban al templo.
A pesar de la discreción, la luz interior y las sombras del trabajo en curso se dejan ver a través de las rendijas. Toda la zona ha sido acordonada.
La Santa Sede difundió ya la primera imagen de la sepultura, cumpliendo el deseo expreso del pontífice de mantenerla “en la tierra, simple, sin un decoro particular”, como dejó escrito en su testamento.
Según confirmó el portavoz vaticano Matteo Bruni, el sepulcro podrá ser visitado desde la mañana del domingo 27 de abril.
Francisco tenía un fuerte vínculo espiritual con esta basílica desde antes de su elección en 2013, y solía visitarla antes y después de cada viaje apostólico para encomendarse a la Virgen.
Su última visita fue el 23 de marzo, tras recibir el alta médica del hospital Gemelli, donde permaneció internado 38 días por problemas respiratorios.
Fallecería un mes después, el 21 de abril, a causa de un ictus y otras complicaciones.
El cuerpo del pontífice permanece expuesto en la basílica de San Pedro del Vaticano hasta el viernes por la noche, permitiendo a los fieles darle el último adiós.
El funeral se celebrará el sábado 26 por la mañana en la Plaza de San Pedro, con la presencia de jefes de Estado, monarcas y líderes religiosos de todo el mundo.
Posteriormente, el féretro será trasladado en cortejo hasta Santa María La Mayor para su sepultura definitiva.