Una ballena jorobada de aproximadamente siete metros fue encontrada sin vida en la playa de Coyuca de Benítez, Guerrero, con evidentes signos de haber quedado atrapada en redes de pesca. Ambientalistas denunciaron este miércoles que la muerte del cetáceo es consecuencia directa de prácticas pesqueras negligentes.
De acuerdo con restauranteros locales, el mar arrastró el cuerpo del animal hasta la orilla la tarde del martes, donde encalló sin vida. Vecinos que acudieron al sitio confirmaron que el mamífero tenía una cuerda atada al cuerpo y parte de una red de pesca enredada en la cola. También detectaron un cabo que salía de su boca.
Habitantes y comerciantes de la zona solicitaron el apoyo urgente de autoridades ambientales federales y de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de Guerrero para sepultar al animal, debido al temor de que su descomposición contamine el entorno o que embarcaciones lo arrastren de regreso al mar.
La organización civil Los Guerreros Ambientales lamentó que la ballena muriera justamente el Día Internacional de la Madre Tierra, subrayando la gravedad del caso como un reflejo de la crisis ambiental provocada por la pesca irresponsable y la contaminación marina.
«Es un hecho grave, no solo por la pérdida del animal, sino porque representa un riesgo para la salud pública y altera el equilibrio del ecosistema costero», señalaron integrantes del colectivo, quienes pidieron mayor vigilancia y regulación de las actividades pesqueras en la región.