Este martes 7 de mayo comenzó el cónclave en la Capilla Sixtina del Vaticano para elegir al nuevo Papa, tras el fallecimiento de Francisco el pasado 21 de abril. Sin embargo, después de las primeras votaciones, no se logró el consenso necesario entre los cardenales electores.
La fumata negra que salió de la chimenea instalada en la Capilla confirmó que no hubo acuerdo, lo que significa que aún no hay un sucesor para liderar a la Iglesia Católica y a sus más de mil millones de fieles en el mundo.
El cónclave, que se desarrolla en total aislamiento y bajo estricta confidencialidad, continuará este miércoles con nuevas rondas de votación. Según las reglas, se requiere una mayoría de dos tercios para que un candidato sea elegido como Papa.
Mientras tanto, el mundo permanece a la espera de la tradicional fumata blanca que anunciará que finalmente se ha elegido a un nuevo pontífice.