La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su pesar y solidaridad con los familiares de los seis militares que fallecieron tras la explosión de una mina terrestre en la zona limítrofe entre Michoacán y Jalisco. El incidente también dejó dos soldados heridos.
Sheinbaum evitó señalar a algún grupo criminal y aseguró que las investigaciones están en curso para esclarecer los hechos. Las autoridades competentes ya trabajan en el caso para determinar responsabilidades.
La explosión ocurrió mientras los militares patrullaban en un vehículo blindado durante labores de reconocimiento en una región marcada por la presencia de grupos delictivos. El artefacto detonó de manera inesperada, según fuentes oficiales del Ejército.
El incidente se registra después de un operativo iniciado el sábado pasado para desmantelar un centro de operaciones y entrenamiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Santa María del Oro, donde también hubo enfrentamientos con fuerzas militares.