La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, colocó a México en una lista de países considerados “adversarios” de su nación, junto con Irán, China y Rusia, al asegurar que ninguno logrará intimidar a Estados Unidos. Así lo declaró durante una comparecencia ante el Comité de Gastos del Senado en Washington.
Al ser cuestionada por el senador Lindsey Graham sobre el papel de México en la lucha contra el narcotráfico, Bondi evitó una respuesta directa y pidió abordar el tema en sesión privada. Ante esto, el senador republicano acusó que “la mitad de México está bajo control del crimen organizado” y que eso pone en riesgo la seguridad de EE.UU.
Graham enfatizó que el país no estará seguro mientras México no cambie su estrategia de combate al crimen. Su crítica subrayó una creciente tensión en torno a la cooperación bilateral en temas de seguridad y lucha contra el narcotráfico.
Bondi, por su parte, afirmó que el gobierno de Donald Trump ha sido firme frente a amenazas extranjeras y que tomará las medidas necesarias para proteger a la nación, mencionando que tanto el tráfico de drogas como las acciones de países como México representan riesgos potenciales para la seguridad estadounidense.