Los familiares de los cinco integrantes del Grupo Fugitivo, reportados como desaparecidos en Reynosa, Tamaulipas, han cuestionado públicamente a la Fiscalía estatal por anunciar su presunto asesinato sin tener resultados concluyentes de las pruebas de ADN. Los restos hallados en un predio, según denuncian, son fragmentos calcinados sin identificación certera.
Durante una reunión con medios en la Ciudad de México, los familiares señalaron que las muestras genéticas les fueron tomadas un día después del anuncio oficial, y hasta el momento no han recibido resultados. También reclamaron que nunca se les pidió información sobre señas particulares que pudiera ayudar a identificar los cuerpos.
Criticaron al fiscal Irving Barrios por dar por muertos a los músicos sin pruebas concluyentes, lo que provocó una oleada de mensajes de condolencias en redes sociales antes de que las familias fueran notificadas formalmente. Incluso un funcionario de la misma fiscalía especializado en desaparecidos, presente con ellos, se mostró sorprendido por el anuncio.
Ante estas irregularidades, los familiares han solicitado que la Fiscalía General de la República (FGR) atraiga el caso, y piden además medidas de protección por temor a posibles represalias, al considerar que la situación se ha vuelto delicada para ellos y sus seres queridos.