La Selección Mexicana cerró la fase de grupos de la Copa Oro con una victoria de 2-0 sobre Surinam, lo que le permitió avanzar a la siguiente ronda como líder del sector. Sin embargo, el rendimiento del equipo generó dudas, ya que, pese al resultado, el funcionamiento colectivo fue irregular y poco convincente.
Durante la primera mitad, el Tricolor mostró breves destellos de dominio, pero perdió el control del juego conforme Surinam se asentó en el campo. La ofensiva mexicana careció de coordinación y profundidad, y la dupla Julián Quiñones–Raúl Jiménez no logró conectarse, mientras que otros atacantes como Alexis Vega y Roberto Alvarado tuvieron una participación discreta.
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Fue hasta el segundo tiempo que México logró marcar diferencia, con dos goles de César Montes, ambos en jugadas a balón parado. El defensa central remató de cabeza al 57’ y repitió al 63’, convirtiéndose en el jugador más destacado del encuentro y asegurando el triunfo.
El central con el doblete 🤩 pic.twitter.com/k2WpXFJN7W
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Aunque el equipo de Javier Aguirre mantiene el liderato del grupo, las carencias ofensivas, la falta de claridad en el juego y la dependencia de jugadas fijas preocupan de cara a los siguientes compromisos. México deberá mejorar su rendimiento si quiere competir con solidez en la fase eliminatoria del torneo.
