En la Selva Lacandona de Chiapas se confirmó el registro de una nueva especie de murciélago gigante, lo que amplía el catálogo de biodiversidad en la región y refuerza su papel como refugio de fauna única en México.
El ejemplar corresponde al Phyllostomus hastatus, considerado uno de los murciélagos más grandes de América, solo superado por el Vampyrum spectrum. Con las alas extendidas alcanza hasta 60 centímetros, mide entre 10 y 12 centímetros de cuerpo y llega a pesar cerca de 100 gramos. Se distingue por su piel oscura, complexión robusta y una característica nariz en forma de hoja.
De acuerdo con el biólogo Carlos Alberto Guichard Romero, director operativo del Zoológico Miguel Álvarez del Toro (ZooMAT), la especie ya había sido documentada en países vecinos como Belice y Guatemala, pero su hallazgo en territorio chiapaneco confirma su distribución natural en México. El descubrimiento se realizó en un árbol de ceiba, y fue avalado mediante una publicación científica.
A diferencia de otras especies de gran tamaño que son carnívoras, este murciélago se alimenta principalmente de insectos y frutos, lo que lo convierte en un aliado para el control de plagas, la polinización y la dispersión de semillas, procesos vitales para la regeneración de los bosques tropicales.
