En una audiencia en la Corte de Distrito Este de Nueva York, el narcotraficante mexicano Ismael “El Mayo” Zambada se declaró culpable de dos cargos de crimen organizado, ante el juez Brian Cogan. Durante su comparecencia en Brooklyn, admitió haber fundado y dirigido durante cinco décadas el Cártel de Sinaloa. “Durante 50 años he dirigido una gran red criminal… Desde el principio y hasta el momento de mi captura he pagado sobornos a policías, militares y políticos en México”, expresó ante fiscales, agentes de la DEA y medios de comunicación.
Zambada renunció a su derecho a juicio y apelación, y su sentencia fue programada para el 13 de enero de 2026. El fiscal adjunto Michael Galleoti afirmó que el capo hizo negocios multimillonarios y que “la corrupción protegió sus operaciones criminales”. Además, advirtió: “Seguiremos persiguiendo a los narcos para que enfrenten la justicia en Estados Unidos”.
Por su parte, la exfiscal general Pam Bondi sostuvo que “El Mayo Zambada morirá en prisión por los crímenes de tráfico de droga y homicidios que cometió”. Bondi agradeció a las autoridades de Estados Unidos y México por arriesgar sus vidas para detener a líderes criminales. El director de la DEA, Terry Cole, reconoció el liderazgo de Bondi y recordó que cuando iniciaron la persecución se pensaba que figuras como Zambada eran intocables: “Pero hoy, ante la corte, dijo palabras que lo cambian todo: culpable. Eso lo cambia todo. Es el colapso del cártel”.
El fiscal Nocella calificó la declaración como histórica: “El Cártel de Sinaloa ha sido decapitado. Primero El Chapo y ahora El Mayo están convictos”. Zambada enfrenta una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad bajo fianza, lo que, según los fiscales, pone fin a una era de impunidad para los líderes de esa organización criminal.
