El Departamento de Estado de Estados Unidos informó que revisa los registros de más de 55 millones de extranjeros con visas vigentes, con el fin de detectar posibles violaciones a las normas migratorias que puedan derivar en la revocación del documento o en la deportación de quienes ya se encuentren en el país.
La dependencia explicó que todos los titulares de visa están sujetos a una “evaluación continua”, mecanismo que permite identificar situaciones que los hagan inelegibles para mantener el documento. Entre los factores revisados están la permanencia ilegal, la actividad criminal, riesgos a la seguridad pública, así como vínculos con organizaciones terroristas.
De acuerdo con la autoridad estadounidense, si se encuentra información que compruebe la violación de los requisitos, la visa será anulada de inmediato y, en caso de que la persona se encuentre en territorio estadounidense, podrá ser expulsada.
“El proceso incluye toda la información disponible, como registros de aplicación de la ley, antecedentes migratorios o cualquier dato que surja después de la emisión de la visa que señale una posible inelegibilidad”, detalló el Departamento en respuesta a la agencia Associated Press.
