El hallazgo de dos peces remo en las costas de Baja California Sur ha generado interés tanto entre especialistas como en redes sociales, debido a la poca frecuencia con la que esta especie aparece en la superficie. Los ejemplares fueron encontrados malheridos y aún con vida, pero murieron poco después del descubrimiento.
El responsable del hallazgo fue el naturalista René Villanueva, quien junto a la bióloga marina Fernanda Raygoza documentó a detalle la presencia de estos peces de aspecto alargado y coloración metálica. Según explicó Villanueva, las heridas eran compatibles con ataques de tiburón, lo que pudo obligarlos a subir desde las profundidades oceánicas.
Tras su muerte, los científicos comenzaron con el registro y medición de los cuerpos, ya que esta especie, conocida como pez remo o Regalecus glesne, es considerada enigmática debido a su hábitat profundo y a que rara vez es vista viva por humanos. Este hallazgo representa una oportunidad valiosa para estudiar su biología y comportamiento.