Una adolescente fue rescatada con vida luego de colocarse en una situación de alto riesgo a más de 300 metros de altura en la cima de una antena de comunicaciones, con la aparente intención de arrojarse al vacío.
Los hechos ocurrieron cuando elementos de Protección Civil y Bomberos acudieron al llamado de auxilio y ascendieron hasta la parte más alta de la estructura, donde encontraron a la menor en posición peligrosa. Durante la intervención, la joven manifestó que atravesaba por un periodo de depresión y otros problemas personales que la llevaron a intentar quitarse la vida.
Mediante diálogo y acompañamiento, los rescatistas ganaron su confianza y la aseguraron con un arnés de seguridad, lo que permitió realizar un descenso controlado y seguro hasta la base de la torre.