El Congreso de Tamaulipas aprobó este viernes, durante su Sesión Pública Extraordinaria, un decreto que endurece las sanciones contra quienes cometan robo en instituciones educativas del estado.
Con la reforma al Código Penal, esta conducta será castigada con penas de 1 a 15 años de prisión y multas de 140 a 180 veces la UMA, con el objetivo de proteger los bienes de las escuelas y brindar mayor seguridad a estudiantes, docentes y familias.
La propuesta fue presentada en tribuna por la diputada Blanca Aurelia Ansaldúa Nájera, del partido Morena, quien destacó que los planteles educativos son espacios vulnerables y que estos delitos afectan no solo el patrimonio, sino también la estabilidad emocional de las comunidades escolares.
El dictamen fue aprobado por unanimidad y turnado al Poder Ejecutivo estatal para su publicación y entrada en vigor, refrendando el compromiso legislativo de reforzar la seguridad en el sector educativo de Tamaulipas.