El auxilio militar no se detiene. Miles de elementos del Ejército, la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional permanecen desplegados en cinco estados del país, donde las lluvias han dejado severas afectaciones. A través del Plan DN-III-E, las fuerzas armadas mantienen operativos de rescate, limpieza, atención médica y distribución de víveres para las comunidades más golpeadas.
De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), son 8 mil 800 militares los que participan en estas acciones en Hidalgo, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí y Veracruz, utilizando maquinaria pesada, aeronaves, hospitales móviles, cocinas comunitarias y plantas potabilizadoras para atender a miles de damnificados.
En Veracruz, donde se concentra el mayor número de tropas, operan 3,700 elementos que han evacuado a más de 160 personas y entregado 94 mil despensas y 173 mil litros de agua. En Puebla y Hidalgo, las labores han incluido la habilitación de decenas de albergues, la limpieza de calles y el retiro de toneladas de escombros en zonas como Tianguistengo, Huehuetla y Yahualica.
Mientras tanto, en San Luis Potosí y Querétaro, el personal militar trabaja en comunidades de la Huasteca y la Sierra Gorda, donde han realizado evacuaciones, consultas médicas y remoción de árboles caídos, además de restablecer servicios básicos en localidades afectadas por deslaves y desbordamientos.
Con estas acciones, la Sedena reiteró que el objetivo del Plan DN-III-E es proteger la vida y el bienestar de la población civil, manteniendo el despliegue operativo hasta que las condiciones climatológicas y de seguridad lo permitan.