La indignación tomó las calles de Morelia este 2 de noviembre, cuando decenas de personas marcharon para exigir justicia por el asesinato de Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, ocurrido durante el Festival de las Velas el 1 de noviembre. Bajo la consigna “¡Ya basta de abusos y omisiones!”, familiares y simpatizantes llevaron el féretro del edil en una movilización que partió desde la Plaza Morelos hasta el Palacio de Gobierno.
Durante la protesta, un grupo de inconformes irrumpió en el edificio, realizó pintas y destrozos, exigiendo la renuncia del gobernador y un alto a la violencia en Michoacán. Manzo se convirtió en el sexto alcalde asesinado en México este año y el tercero en el estado, lo que ha encendido las alarmas sobre la inseguridad y la impunidad que enfrentan las autoridades locales.
El caso ha generado una ola de reacciones sociales y políticas, mientras organizaciones ciudadanas piden que el gobierno federal garantice protección y justicia para los municipios golpeados por la violencia.
