Migrantes instalados en Nuevo Laredo se han ocupado como trabajadores de obras civiles para cubrir la falta de mano de obra que se presenta en la ciudad fronteriza derivado a la demanda de obra pública y privada que ha prevalecido en 2019.
“Hemos batallado mucho al grado que compañeros andan consiguiendo gente migrante para realizar el oficio. Los constructores pasan a traerlos a los lugares donde se encuentran alojados y los retornan una vez que finaliza la jornada, derivado a la falta de mano de obra” dijo José Cruz de la Luz Paz, presidente de la Asociación de Constructores de Nuevo Laredo.
Otra de las razones que han provocado la situación es el incremento al salario mínimo, donde las personas se han empleado dentro de una maquiladora con áreas confortables, dejando atrás las jornadas en la intemperie.
Sin precisar el número de migrantes que se han empleado mientras esperan ser atendidos por el gobierno de los Estados Unidos, De la Luz Paz, explicó que la cantidad es variable, pero son en obras de infraestructura donde los migrantes se han empleado.
